martes, 23 de octubre de 2012
Dificultades para poder comunicar con l@s pres@s polític@s.
Pequeños detalles que dificultan las comunicaciones con presos:
“Hace algún tiempo que visito a presos en la cárcel (...). Tengo entendido que para solicitar cita previa para las visitas, el número de teléfono que había antes era con prefijo 900+ (gratuito). Ahora resulta que han cambiado a un número de teléfono de pago, y además es una "máquina" que da mal las citas. ¿Ustedes como Comités, no podrían hacer algo más para que las instituciones vuelvan a poner el número de teléfono gratuito?. Al menos que coloquen a una persona que atienda el teléfono. Gracias. Un saludo.”
“Hola compa. Nosotros también estamos indignados como visitantes de presxs. Hasta hace año y pico, las llamadas eran al 900, o a la propia cárcel (desde otro fijo salía barato) y voz de un funcionario. Ahora el teléfono central, a veces, realiza dobles click en visitas y sacan a la presa para una visita inexistente, o al revés, y la tienen que ir a buscar a todo trapo. ¿Y para las madres y padres, muchos de ellos de 80 años para arriba que les anden volviendo locos por el telefónito automático?. Cuando hablas por fin con algún funcionario sensato cara a cara en las visitas, te reconocen que es una chapuza y además pagando, pero que son "cosas de arriba".
Sí, la cárcel también es un enorme, un gigantesco negocio. Desde dentro, solo pueden llamar con determinadas tarjetas oficiales de Telefónica (5 o 10 euros). No pueden entrar las de la calle. Los cientos de millones en medicamentos psiquiátricos para dejar a muchos sanos muy muy mermamos.... El "Economato" de las cárceles, que todos solo llaman (la vulgar) cantina... y de económica no tiene nada, además de ser más escueta que casi nada.
No, nosotros no podemos hacer nada, solo seguir denunciando todas las tropelías minúsculas, enanas, medianas, grandes, enormes y mayúsculas que se cometen en el entorno del mundo carcelario, y más aún contra los presos políticos. En concreto, nunca nos han hecho el menor caso en todas esas peticiones, de varios familiares y amigos, de Galiza, E.H y Madrid que lo han pedido en varias cárceles. No por eso se debe negar, que cuantas más denuncias y difusión, mejor que mejor...”
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