Mary Harris, imprescindible.

Foto. Mary Harris.

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Mary Harris

Fue una destacada dirigente y organizadora del proletariado de Estados Unidos. Los obreros la llamaban “Mother Jones”.

Nació en un hogar campesino de militantes independentistas irlandeses y muy joven conoció el exilio, cuando su familia tuvo que huir a Toronto.

En 1861 se casó con George Jones, un obrero fundidor, con quien tuvo cuatro hijos. Dio sus primeros pasos en la lucha proletaria junto a su compañero. Seis años después, su marido y sus cuatro hijos murieron en una epidemia de fiebre amarilla.

Mother Jones se incorporó a la organización semi- clandestina Caballeros del Trabajo, que reunía a los sectores más explotados del movimiento obrero -entre ellos mujeres, negros e inmigrantes-. A partir de 1890, se sumó a los esfuerzos de los mineros para fundar su propio sindicato. La voz de Mother Jones resonaba en las minas y las fábricas.

En 1902 el fiscal de Virginia occidental, ordenó su detención diciendo que era “la mujer más peligrosa de Estados Unidos”. No había obedecido la prohibición de organizar reuniones públicas con los mineros en huelga. Al año siguiente organizó una marcha de los niños que trabajaban en las fábricas y minas de Kensington.

En 1905 ingresó en el Partido Socialista. En 1912, en medio de una violenta huelga minera, organizó un gran movimiento de solidaridad, que incluía movilizaciones de las mujeres, hijos e hijas de los huelguistas, para rodear y presionar a los patronos.

Detenida junto a otros luchadores en 1913 en el transcurso de una huelga por denunciar las duras condiciones de trabajo en las minas, la acusaron de intento de asesinato y después de una farsa judicial la condenaron a 20 años de cárcel. Pero su firmeza ante los jueces hizo que el Senado del Estado de Virginia occidental investigara las condiciones de las minas. Su detención desencadenó numerosas protestas obreras. Finalmente fue absuelta y liberada.

Meses después la volvieron a detener a causa de una huelga de los mineros del carbón en Colorado. La llevaron a juicio varias veces, acusándola de sedición, ya que en aquella época aún no se había inventado el delito de terrorismo.

Mother Jones murió a los 93 años. Su última voluntad fue que su cuerpo fuera enterrado en el cementerio de Mount Olive, en Illinois, cerca de los mineros que habían sido asesinados tras el levantamiento de Virden en 1898.

Dibujo. Carrero Blanco volando.

Vamos a contar otro chiste sobre el almirante fascista Carrero Blanco
Colaboración

Más de uno se queja de que aquí no ha cambiado nada, pero antes se podían hacer chistes sobre Carrero Blanco sin que la fiscalía te enviara a la cárcel. Eran otros tiempos. Ahora no quieren que nadie se burle de ese fascista al que el fiscal llama “El Almirante”. Ya ven; se les ve el plumero.

Hace 33 años, en el libro “Tipycollorgía“, los humoristas Tip y Coll escribieron el siguiente chiste: “De todos los ascensos de Carrero Blanco, el último fue el más rápido”. En aquellos tiempos a la fiscalía ni se le ocurría pedirles dos años y medio de cárcel a los conocidos humoristas.

Hace 17 años, en su libro “La agonía del dragón”, Juan Luis Cebrián contó este chiste sobre “El Almirante” sin que nadie pidiera que lo metieran en la cárcel: “Carrero Blanco coge un taxi y pide que le lleven a Claudio Coello. ‘¿A qué altura de la calle le dejo?’, pregunta el taxista”.

La diferencia entre Cebrián y cualquier otro chistoso es que aquel es un “pez gordo” con el que los fiscales no se atreven por aquello de la igualdad ante al ley, o sea, que la cárcel no se ha hecho para los señoritos como Cebrián.

En 2014 la revista satírica “El Mundo Today” publicó dos noticias sobre la muerte del almirante:

El coche de Carrero Blanco toma tierra (http://www.elmundotoday.com/2011/03/el-coche-de-carrero-blanco-toma-tierra/)

Carrero Blanco será la imagen de Vueling (http://www.elmundotoday.com/2009/04/carrero-blanco-sera-la-imagen-de-vueling/)

Sobre foto de Carrero. "vueling.com vuelas que ni te enteras, coche included".

Otra revista satírica, Mongolia, ha dedicado un espacio a este momento tan especial para la libertad de expresión a la que pueden echar un vistazo en este enlace:

https://twitter.com/revistamongolia/status/819083680396275712

La represión fascista ha agudizado aún más el ingenio popular, creando nuevos chistes que harán de “El Almirante” fascista una parte del subgénero cómico. En 2014, tras la redada de la Guardia Civil por los chistes contra Carrero Blanco, los chistes sobre el almirante fascista se convirtieron en “trending topic”. Las redes sociales se llenaron con más chistes y más chistes.

Ahora ha ocurrido algo parecido. El viernes 13 se convocó en la Plaza de Cibeles, en Madrid, una concentración para que los asistentes contaran un chiste de Carrero Blanco:

https://iniciativadebate.org/2017/01/12/cien-mil-personas-contaran-hoy-la-vez-chiste-carrero-blanco-plaza-cibeles/

“¿Qué tienen en común Amancio Ortega y Carrero Blanco?. Que ambos explotan para llegar a lo más alto”
https://twitter.com/masademocrata/status/819909933114200064/photo/1

“El helicóptero de la DGT multa a Carrero Blanco por saltarse un semáforo, literalmente”
https://twitter.com/ElHumanoide/statuses/460857006610718720

“Cárcel para un tuitero por un chiste sobre Carrero Blanco. Pena que esté muerto porque lo habría celebrado por todo lo alto”
https://mobile.twitter.com/elbaronrojo/status/819107685564116992

“Es cierto que Carrero Blanco subió al cielo, pero pasó de largo”
https://twitter.com/diostuitero/statuses/461061591283560448

“Cuidado con los chistes sobre Carrero Blanco que los fiscales los pillan volando”
https://twitter.com/moedetriana/status/818827698449551363

“Carrero Blanco fue el segundo hombre en llegar a la Luna”
https://twitter.com/RubenCuellar_97/statuses/461113923400630272

“Volando voy, volando vengo, vengo (Carrero Blanco)”
https://twitter.com/MeryConlin/statuses/461115199886745600

(desaparecida por la censura)

El rapero Pablo Hasel fue citado el 23 de enero por enésima vez a declarar en la Audiencia Nacional, donde sus letras contra la monarquía no gustan nada a los fiscales y jueces.

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