Foto. John Reed escribiendo a máquina. |
Los
imprescindibles
Agenda
John
Reed
Albert
Rhys Williams
Biografía
de John Reed -extracto-
“Muchos
combatientes del temple de John Reed han luchado contra el frente
contrarrevolucionario, en los Estados Unidos y en Europa con la misma
determinación con que el Ejército rojo peleó frente a la
contrarrevolución en la URSS. Unos han caído víctimas de la furia
homicida; otros han enmudecido para siempre en las cárceles; uno
perdió la vida en una tempestad desatada en el Mar Blanco, de
regreso a Francia; otro se estrelló en San Francisco con el avión
desde el que lanzaba proclamas protestando contra la intervención.
El asalto del imperialismo contra la revolución ha sido furioso,
pero más todavía habría
podido
serlo de no haber existido estos combatientes. No cabe duda de que
hombres como éstos han contribuido en algo a contener los embates de
la contrarrevolución. La Revolución rusa no ha contado solamente
con la ayuda de los rusos, los ucranianos, los tártaros y los
caucasianos; también han aportado a ella sus esfuerzos, siquiera sea
en menor medida, los franceses, los alemanes, los ingleses, los
norteamericanos y otros pueblos. Entre estos hombres no rusos
descuella en primer plano la figura de John Reed, hombre de dotes
excepcionales, arrebatado por la muerte cuando se hallaba en la
plenitud de sus fuerzas (...)
A
pesar de que la muerte sorprendió a John Reed en el exilio,
desterrado de su patria y condenado a una pena de cinco años de
cárcel, la misma prensa burguesa se vio obligada a rendir tributo al
artista y al hombre. Un suspiro de alivio se escapó del pecho de los
burgueses: ¡John Reed, el gran desenmascarador de sus mentiras y de
su hipocresía, el hombre cuya pluma era para ellos un azote, ya no
existía!
Los
revolucionarios de los Estados Unidos han sufrido una pérdida
irreparable. Es muy difícil para los camaradas que viven fuera de
Norteamérica calibrar el profundo duelo provocado por su muerte. Los
rusos consideran como algo perfectamente natural y lógico el que un
hombre muera por sus convicciones. No hay por qué derramar lágrimas
sobre una muerte así. Miles y decenas de miles de hombres han dado
su vida por el socialismo en la Rusia soviética. En los Estados
Unidos, las vidas así inmoladas no abundan. Si se quiere, John Reed
fue el primer mártir de la revolución, el que marcó el camino
seguido luego por miles. El brusco final de su vida, verdaderamente
meteórica, en la lejana Rusia cercada por el bloqueo, fue un golpe
terrible para los comunistas norteamericanos.
Un
consuelo les queda a sus viejos amigos y camaradas; los restos de
John Reed reposan en el único lugar en el mundo donde él quería
encontrar su último descanso: en la Plaza Roja de Moscú, al pie de
las murallas del Kremlin.
Sobre
su nicho se ha colocado una piedra sepulcral a tono con su carácter,
una piedra de granito sin pulir en la que aparecen grabadas estas
palabras:
JOHN
REED - DELEGADO A LA TERCERA
INTERNACIONAL
– 1920”
Dibujo, (mani, mujeres con el puño alzado). |
Poesías
proletarias
LAS
DECISIONES
Las decisiones que tomamos
van marcando el camino
de nuestras vidas...
Elegir es igual a descartar
todos los días
a todas horas...
Algunas son importantes
otras insignificantes...
Y todas nos van
haciendo,
formando,
como somos...
María Jesús Romero
16 octubre 2016
Las decisiones que tomamos
van marcando el camino
de nuestras vidas...
Elegir es igual a descartar
todos los días
a todas horas...
Algunas son importantes
otras insignificantes...
Y todas nos van
haciendo,
formando,
como somos...
María Jesús Romero
16 octubre 2016
Texto de Manuel Arango Riego. Zuera 2013. |
Difusión:
Texto
de Manuel Arango sobre su valle minero y luchador.
Texto, en blanco sobre negro. |
Muro
Solidario:
“El
mayor problema de la represión es el silencio que la legitima. No
seas cómplice...
Denunciemos todos los actos de represión del Estado.
Salgamos a las calles, esto tiene que cambiar.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario