Carta de Isabel Aparicio desde Zuera (2 de 2)

Carta de Isabel Aparicio Sánchez
(2 de 2)


Cárcel de Zuera (Zaragoza), módulo 13
16 de julio 2012

(…)
Y después de este grito de Revolución, casi tendría que ir acabando esta carta; en realidad, sería un buen final para ella, pero como me quedan cosillas que comentar y porque el amor es uno de los componentes de la Revolución, hablemos de amor. Manolo está en un módulo normal, de los llamados “conflictivos”, como si este no lo fuera; es el único político que hay en el módulo, los vascos están en otros; sus condiciones han empeorado en varios sentidos con respecto a Aranjuez: por un lado, tiene menos tranquilidad para estudiar y para escribir, en definitiva, para trabajar; además, en esta cárcel solo te puedes quedar en la celda por la tarde los sábados y los domingos, menos mal que le han permitido tener flexo en la celda para poder estudiar por las noches, aunque lo ha tenido que comprar según el modelo que aquí permiten (el que trajo de Aranjuez se ha quedado en Ingresos, no responde a las “normas” de esta “casa”, cuestión de Seguridad, dicen); en el tema médico, por otro lado, parte de las medicinas que le daban en Aranjuez para la ciática aquí las tiene que comprar por demandadero, el negocio es el negocio. Y no le queda otra si no quiere andar más doblado que un 4 porque aquí no hay fisioterapeuta, ese “servicio” solo existe en la cárcel de Aranjuez, es la única de todo el Estado que lo tiene. De momento no le ha dado un ataque de ciática en esta cárcel, pero aún así, derecho, lo que se dice derecho, no anda. Pero lo que más me llamó la atención fueron sus ojos, los tiene tan mal que me asustó. No le han sacado al oftalmólogo, ya sabéis que las cosas de Hospital van despacio, y el médico de la cárcel, así, a “ojo de buen cubero” le ha dicho que no son cataratas, sino un virus, así que colirio al canto ¿hasta cuando?

Por lo demás, está como siempre, en plenas facultades, su capacidad de trabajo y su voluntad férrea no han mermado en absoluto, al contario. A sus 63 años sigue estudiando en la UNED, este año empieza 5º de Historia; continúa escribiendo y sigue haciendo dibujos. En un acto en A Coruña, con cuatro mineros, en nombre del movimiento de solidaridad con los presos políticos darles todo el apoyo y se les entregó un dibujo de Manolo sobre la lucha minera. El caso es que como las luchas mineras están teniendo una gran repercusión mediática, el dibujo salió hasta en la tele.


A parte de todo esto, te puedo contar que, para mí, sigue tan guapo como siempre. Tenemos 4 comunicaciones al mes, dos por locutorio de media hora y otras dos en vis a vis de dos horas cada uno. La primera comunicación fue por cristales y ocurrió lo normal después de tantos años sin tener un momento cara a cara para charlar y de tantas cosas que decirnos, vamos que nos atropellábamos el uno al otro para hablar. Las siguientes ya todo ha cogido otro ritmo, el ritmo de siempre porque me he dado cuenta que es como si esos cinco años de separación impuesta no hubieran existido, no existen lagunas, ni siquiera paréntesis; solo ha cambiado, al parecer, que yo ya no llevo gafas y para recuperar mi imagen se tiene que conformar cuando me pongo las de ver de cerca; sí, esas verdes en plan rana Gustavo. Pues para él son preciosas. Lo que hace el amor.

Yo me voy a matricular en la UNED, me parece que ha llegado el momento, no de continuar en Historia, que no me apetece, sino de coger otra materia que me inspira, Antropología. Le pediré a Carmen López Anguita antes de que la pongan en la calle de una puta vez, que me mande todos los apuntes, pues es lo que ha estado estudiando.


Bueno, por ésta ya vale. Disfrutad de las vacaciones si podéis, que la lucha es larga y hay que intentar coger también un poco de aires relajantes para seguir en las brechas.
Un montón de besos y achuchones.

Isabel

(Es continuación de la entrada de ayer)