lunes, 4 de agosto de 2014

Libertad inmediata Manuel Arango Riego. Impidamos otro crimen de Estado.

Taco de panfletos en exigencia libertad Manuel Arango.
¡Exijamos la libertad inmediata del preso político Manuel Arango Riego!

¡Impidamos un nuevo crimen de Estado!

Manuel Arango Riego nació en 1948 en Villaseca de Laciana (León), en el seno de una familia minera. Ya desde su infancia conoció la miseria, las insalubres condiciones de trabajo y la represión que, según sus propias palabras, habían convertido “el valle minero en un lugar parecido a un campo de concentración”.
En su juventud se traslada a Barcelona, donde trabaja en algunos talleres y en SEAT. Es en esa ciudad donde cono ce a militantes de la Organización de Marxistas-Leninistas de España (OMLE), cuando ésta preparaba las condiciones para la reconstrucción del partido comunista. Se incorpora a ella y despliega una amplia actividad política en el cinturón industrial de Barcelona. Posteriormente, vuelve a su tierra, con la misión de organizar el PCE(r) en la región astur-leonesa.
Durante esa etapa fue detenido, torturado y encarcelado en tres ocasiones, acusado de “asociación ilícita y propaganda ilegal”. En una de ellas, la guardia civil irrumpió en casa de sus padres y le tiroteó delante de ellos. Fue trasladado en estado muy grave a un hospital de León, en el que los médicos se niegan a que sea interrogado, por lo que la guardia civil le conduce al hospital penitenciario de Carabanchel, donde los carniceros de bata blanca no tienen inconveniente alguno en dejarle en manos de los torturadores. Allí le operan, por llamarlo de alguna manera, le cortan parte de los intestinos, por lo que sufre una úlcera duodenal crónica y, con las transfusiones, le contagian la hepatitis C.
A pesar de su delicado estado de salud, cuando años más tarde sale de la cárcel, pasa a la clandestinidad y se incor pora a la comisión de propaganda del Comité Central del PCE(r), en la que desarrolla su labor durante casi 20 años.
Fue detenido nuevamente en Barcelona en 2007 y condenado a 12 años. Actualmente se encuentra en la cárcel de Zuera, a cientos de Km. de su familia y amigos.

Cartel. (frase Manuel Arango sobre los presos políticos enfermos)
Hace unos meses, falleció Isabel Aparicio Sánchez en la cárcel de Zuera, víctima de la desatención médica y del plan de exterminio que pesa sobre los presos políticos. En estos momentos, es la vida de Manuel Arango Riego la que corre peligro. Su estado físico ha empeorado considerablemente durante el último año.
La hepatitis C que padece desde hace mucho tiempo ha avanzado sustancialmente, además de haberse agravado las diversas dolencias que sufre en la columna vertebral, hasta el punto de que debe ser ayudado por otros presos para poder desplazarse. Ahora, tras el duro golpe que ha supuesto para él la muerte en prisión de Isabel Aparicio, su compañera y camarada, el cuadro clínico que presenta es del todo incompatible con su permanencia en la cárcel.
Sin embargo, el régimen monarco-fascista español, que se
proclama “garante de la integridad física” de los prisioneros, se ha propuesto aniquilarle. Hace unos días, a pesar de su
deteriorado estado, fue trasladado desde la cárcel de Zuera
(Zaragoza) hasta Madrid, donde la Audiencia Nazional ha iniciado trámites para abrirle un nuevo sumario. ¿A qué responde semejante ensañamiento?
En la carta que relata el calvario sufrido por Isabel y su posterior fallecimiento, podemos encontrar la respuesta:
La policía me llevó hasta el féretro, coloqué mis manos esposadas en el sudario de Isabel y después levanté mis dos puños hacia lo alto. La policía me sacó de la sala.
El dolor y el odio total hacia mis enemigos de clase me
acompañaron en la soledad del furgón policial en el retorno a la prisión”.
No han podido doblegarle. Razón de más para exigir que se le aplique inmediatamente el artículo 196 del Reglamento Penitenciario, que prevé la libertad para los presos gravemente enfermos.

Manuel Arango es el ejemplo de un obrero comunista que ha dedicado toda su vida a defender la causa de los trabajadores. No podemos consentir que siga en la cárcel ni un solo día más. Hay que movilizarse; llenar las calles de pintadas; denunciar su situación en asambleas, charlas y mítines; organizar
concentraciones, etc. hasta conseguir que sea liberado. Sin olvidar que debemos continuar enviándole mensajes de apoyo,
hacerle llegar nuestro calor y solidaridad.
¡Manuel Arango, Libertad!

Manuel Arango Riego
C.P. Zuera
50.800 Zuera
ZARAGOZA

S.R.I.

Memoria Histórica 4 y 5 agosto.
Memoria Histórica Internacionalista
Acontecimientos del 4 y 5 de agosto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, q injusticia hacen con estas personas, Manuel se merece LIBERTAD, YA!!!!! Ya falleció, Isabel, ? Que buscan más muertes.....Manuel sé cómo eres.....sigue tú lucha.....besos y todo mí apoyo.