Juan
Manuel Pérez Hernández
Febrero
de 1991. Tras 435 días en huelga de hambre, lxs 60 comunistas y
antifascistas que la desarrollan están extenuadxs. El Estado les ha
arrancado a su compañero Sevi el 25 de mayo de 1990, y dejado a
varixs con secuelas irreversibles. No han logrado sus
reivindicaciones, pero todo un Estado armado hasta los dientes no ha
logrado rendirlxs.
Uno
de los presos comunistas que quedó gravísimamente afectado fue Juan
Manuel Pérez Hernández. Con un Síndrome de
Korsakoff,
que le hace padecer demencia senil prematura, sus siguientes años en
prisión son horrorosos. Sus compañerxs en prisión denuncian
inmediatamente su situación.
“1992.
Carta de Pepe Balmón, preso político del PCE(r):
He
estado con Juan Manuel en la enfermería, con el médico que le
atiende. Me cuenta que se pasó la noche en la bañera, hasta las 8,
que en el recuento, lo encontraron allí. Juan Manuel me dice que
está bien, pero... El médico me confirma lo que me había llegado
por los presos que conviven con él y me resume su estado diciendo
que lo que padece es un proceso irreversible de demencia. Los hechos
que conozco son su manía del baño, su auto-incomunicación (que no
habla con nadie y se pasa los días en cama), que no escribe ni coge
las cartas que le escriben (…), que tiene estallidos alternativos
de euforia, de depresión, de agresividad. Me ha impresionado verlo
allí, en su cama, sin una puta radio, la mirada ausente... Los
médicos dicen que temen encontrarlo ahogado cualquier mañana (…)
Estoy muy jodido de la impresión... ¡Hay que mover cielo y tierra
para sacarlo! ¡Es un deber solidario y humano! (…) Con todo el
dolor, a este hombre, en esta lucha sobrehumana, se le ha roto algo
importante. ¡Dios qué rabia!¡Qué impotencia, qué dolor en el
alma!. A duras penas no he llorado delante de él”.
En
la calle se recoge el guante, y se hace una campaña general por lxs
presxs enfermxs y campañas individualizadas con cada presx políticx
gravemente enfermx. Carteles, difusión de la info, denuncias en
medios alternativos, concentraciones... Y se logra la libertad
condicional en aplicación del artículo 92 por enfermedades graves e
irreversibles: En 1992 para Ramón Foncubierta -Síndrome de
Werningke y en silla de ruedas-, para Sebastián Rodríguez
-Werningke y en silla de ruedas- en 1995, para Milagros Caballero
-Werningke y con muletas- en marzo de 1997 y para Juan Manuel Pérez
Hernández -Síndrome de Korsakoff- en diciembre de 1996. También en
1995 la del preso político militante de los GRAPO Iñaki Kuadra
Etxeandia, que no podía participar en la huelga de hambre debido a
su estado de graves enfermedades. Iñaki falleció a los 49 años en
el verano de 2010.
Juan
Manuel Pérez Hernández fue llevado a su tierra, Tenerife. Y durante
muchos, muchos años su terrible enfermedad le ha tenido preso
también.
Pero
desde hace algún tiempo, Juan Manuel se encuentra más empático,
más alegre, más comunicativo. Y en la foto de diciembre de 2012
veréis que ha recuperado cierta de esa energía que definió toda la
vida anterior a la enfermedad del llamado por todxs sus compañeros y
compañeras de lucha, cárcel y amistad Juan Manuel el “Polvorilla”.
Nos alegramos infinitamente de esta mejora general.
En
las otras 2 fotos, reproducción del cartel y pegatina editados en
1995 y portada del libro que escribió junto con otros camaradas en
los inicios de los 80 en la prisión de exterminio de Herrera de la
Mancha, un libro esencial sobre dialéctica marxista y que ha sido
reproducido en ediciones posteriores en Argentina y Brasil en los 90
y 2000 “Problemas filosóficos de las ciencias modernas”.
CONVOCATORIAS:
Actos
Solidarios en Sevilla:
Derechos
y Libertades Políticas HOY
-Viernes
17: Charla-Debate, con Juanma Olarieta. Facultad de Derecho. 19 h.
-Sábado
18: Expo obras de arte elaboradas por represaliados políticos. CSOA
Sin Nombre. A partir 19 h.
No hay comentarios:
Publicar un comentario