Una información anda circulando por toda España de boca en boca y ningún periódico burgués de la península se ha atrevido a publicarla por lo que de escandaloso tiene para la reputación del ex jefe del gobierno José María Aznar.
Según el informe de marras, cuando Aznar era el Presidente del Gobierno de España, el Ministerio de Fomento encargó a un organismo supuestamente autónomo, pero dependiente de ese Ministerio, el GIF, para que implementase la ejecución de las obras del Tren Rápido Madrid-Barcelona; más conocido por el "AVE".
La obra fue adjudicada a una empresa española llamada Cobra y a una italiana vinculada al Grupo Berlusconi. En esa operación había envuelto un comisionista que sirvió de intermediario entre el organismo dependiente del Ministerio de Fomento y la empresa italiana constructora. El avispado intermediario se ganó por sus diligentes servicios la respetable suma de 48 millones de €.
Pero aquí viene lo bueno. Porque el afortunado comisionista a quien hicieron millonario de la noche a la mañana no era otro que Alejandro Agag, el caballerito español "economista de profesión" que se casó con la joven Ana Aznar, la hija del entonces Presidente de España José María Aznar, el hombre a quien salió a defender con tanto entusiasmo el Rey de España en la reunión cumbre de Chile.
La boda del joven Alejandro Agag con la hija de Aznar había sido celebrada por todo lo alto en el Palacio de El Escorial con la presencia de tres prominentes invitados de honor, el entonces Primer Ministro de Gran Bretaña Tony Blair, el "Padrino" Berlusconi y Su Alteza Real Juan Carlos I de España. Los gastos escandalosos de la boda de la hija del señor Aznar y el joven Alejandro Agag corrió a cargo del gobierno español. ¿Fue para eso que invitaron al Rey?
Información: PCOE www.pcoe.net
Según el informe de marras, cuando Aznar era el Presidente del Gobierno de España, el Ministerio de Fomento encargó a un organismo supuestamente autónomo, pero dependiente de ese Ministerio, el GIF, para que implementase la ejecución de las obras del Tren Rápido Madrid-Barcelona; más conocido por el "AVE".
La obra fue adjudicada a una empresa española llamada Cobra y a una italiana vinculada al Grupo Berlusconi. En esa operación había envuelto un comisionista que sirvió de intermediario entre el organismo dependiente del Ministerio de Fomento y la empresa italiana constructora. El avispado intermediario se ganó por sus diligentes servicios la respetable suma de 48 millones de €.
Pero aquí viene lo bueno. Porque el afortunado comisionista a quien hicieron millonario de la noche a la mañana no era otro que Alejandro Agag, el caballerito español "economista de profesión" que se casó con la joven Ana Aznar, la hija del entonces Presidente de España José María Aznar, el hombre a quien salió a defender con tanto entusiasmo el Rey de España en la reunión cumbre de Chile.
La boda del joven Alejandro Agag con la hija de Aznar había sido celebrada por todo lo alto en el Palacio de El Escorial con la presencia de tres prominentes invitados de honor, el entonces Primer Ministro de Gran Bretaña Tony Blair, el "Padrino" Berlusconi y Su Alteza Real Juan Carlos I de España. Los gastos escandalosos de la boda de la hija del señor Aznar y el joven Alejandro Agag corrió a cargo del gobierno español. ¿Fue para eso que invitaron al Rey?
Información: PCOE www.pcoe.net
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