El rey, heredero elegido por Franco, mantendrá el secreto sobre sus finanzas
El rey Juan Carlos se niega a levantar el velo de opacidad que cubre sus finanzas, como han hecho otras casas reales europeas. Un portavoz oficial del palacio de La Zarzuela recordó ayer a El Confidencial que la Casa Real "no tiene obligación" de someter su presupuesto al control del Tribunal de Cuentas.
Don Juan Carlos dispondrá este año de un presupuesto de ¡¡¡8,9 millones!!! de euros que, según la Constitución, se destinarán al "sostenimiento de su Familia y Casa", y que el monarca "distribuye libremente"; es decir, que el Rey puede gastar ese dinero sin rendir cuentas a nadie.
Sin embargo, la monarquía española no se financia exclusivamente con la partida "Casa Real de Su Majestad el Rey" que figura en los Presupuestos del Estado. A esos 8,9 millones de euros habría que sumar, como mínimo, otra cantidad similar que aportan diversos ministerios para cubrir los gastos de la familia real, principalmente los de Administraciones Públicas -ahora de Política Territorial-, Defensa, Asuntos Exteriores y Presidencia.
Empleados, viajes, palacios...
El primero, por ejemplo, paga los salarios de la mayoría de los empleados de La Zarzuela, unos ¡¡¡140!!! en la actualidad; Defensa hace lo propio con la Guardia Real, el jefe del Cuarto Militar del monarca y los ayudantes de éste y el heredero, Felipe de Borbón; Asuntos Exteriores cubre todos los viajes de la familia real; y Patrimonio Nacional -dependiente del Ministerio de la Presidencia que dirige María Teresa Fernández de la Vega- hace frente a los gastos de mantenimiento y servicio del Palacio Real, El Pardo, La Granja o El Escorial, además del propio palacio de La Zarzuela y la residencia del Príncipe y Letizia Ortiz.
La opacidad de las cuentas reales impide conocer con exactitud la contabilidad de la Casa Real y el coste de mantenimiento de la jefatura del Estado, y mucho menos fiscalizar el destino de los 8,9 millones de euros que Juan Carlos distribuye a su antojo. Lo único que se sabe es que de esa cantidad salen los sueldos de los altos cargos de la Casa Real -entre ellos el de su máximo responsable, Alberto Aza-, así como las asignaciones de los Príncipes de Asturias, Sofía de Grecia y las infantas.
ERC, IU e IC-V presentaron el pasado mes de noviembre en el Congreso una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado de este año para equiparar la asignación que recibe el Rey a la de José Luis Rodríguez Zapatero, que en 2010 cobrará un sueldo de ¡¡¡91.982!!! euros. Los tres partidos exigieron, además, transparencia al presupuesto de La Zarzuela y extender a los miembros de la familia real la obligación de declarar sus bienes y derechos patrimoniales. Pero tanto el PSOE como el PP se opusieron.
El rey Juan Carlos se niega a levantar el velo de opacidad que cubre sus finanzas, como han hecho otras casas reales europeas. Un portavoz oficial del palacio de La Zarzuela recordó ayer a El Confidencial que la Casa Real "no tiene obligación" de someter su presupuesto al control del Tribunal de Cuentas.
Don Juan Carlos dispondrá este año de un presupuesto de ¡¡¡8,9 millones!!! de euros que, según la Constitución, se destinarán al "sostenimiento de su Familia y Casa", y que el monarca "distribuye libremente"; es decir, que el Rey puede gastar ese dinero sin rendir cuentas a nadie.
Sin embargo, la monarquía española no se financia exclusivamente con la partida "Casa Real de Su Majestad el Rey" que figura en los Presupuestos del Estado. A esos 8,9 millones de euros habría que sumar, como mínimo, otra cantidad similar que aportan diversos ministerios para cubrir los gastos de la familia real, principalmente los de Administraciones Públicas -ahora de Política Territorial-, Defensa, Asuntos Exteriores y Presidencia.
Empleados, viajes, palacios...
El primero, por ejemplo, paga los salarios de la mayoría de los empleados de La Zarzuela, unos ¡¡¡140!!! en la actualidad; Defensa hace lo propio con la Guardia Real, el jefe del Cuarto Militar del monarca y los ayudantes de éste y el heredero, Felipe de Borbón; Asuntos Exteriores cubre todos los viajes de la familia real; y Patrimonio Nacional -dependiente del Ministerio de la Presidencia que dirige María Teresa Fernández de la Vega- hace frente a los gastos de mantenimiento y servicio del Palacio Real, El Pardo, La Granja o El Escorial, además del propio palacio de La Zarzuela y la residencia del Príncipe y Letizia Ortiz.
La opacidad de las cuentas reales impide conocer con exactitud la contabilidad de la Casa Real y el coste de mantenimiento de la jefatura del Estado, y mucho menos fiscalizar el destino de los 8,9 millones de euros que Juan Carlos distribuye a su antojo. Lo único que se sabe es que de esa cantidad salen los sueldos de los altos cargos de la Casa Real -entre ellos el de su máximo responsable, Alberto Aza-, así como las asignaciones de los Príncipes de Asturias, Sofía de Grecia y las infantas.
ERC, IU e IC-V presentaron el pasado mes de noviembre en el Congreso una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado de este año para equiparar la asignación que recibe el Rey a la de José Luis Rodríguez Zapatero, que en 2010 cobrará un sueldo de ¡¡¡91.982!!! euros. Los tres partidos exigieron, además, transparencia al presupuesto de La Zarzuela y extender a los miembros de la familia real la obligación de declarar sus bienes y derechos patrimoniales. Pero tanto el PSOE como el PP se opusieron.
Además, el secreto sobre las actividades oficiales del monarca, (son muy habituales sus encuentros con militares, políticos, empresarios o periodistas) se siguen y seguirán manteniendo en el más absoluto secreto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario