OPINIÓN: Carta de un militante del PCE(r) preso

SOLIDARIDAD ENTRE REJASDesde que me trajeron a esta prisión en mayo de 2006, me encuentro encerrado en un módulo en el que no hay ningún otro preso político. Se trata de un caso excepcional, pues ningún otro prisionero político de esta cárcel se encuentra solo y aislado de los demás. Aquí también están encarcelados 12 presos políticos vascos (9 hombres y 3 mujeres), y he solicitado en más de una ocasión que me junten con ellos. Sin embargo, la Dirección de esta prisión, dándole una vuelta de tuerca más a la política de dispersión y aislamiento que desde hace años están aplicando los fascistas contra el conjunto de presas y presos políticos, además de tenerme aislado de mis camaradas y alejado cientos de kilómetros de mi familia en Galiza, me mantiene separado también de los compañeros vascos.
El motivo que me han dado para mantener esta situación de prolongado aislamiento es que tienen “órdenes de Madrid” para no juntarnos, porque según dicen, ejercemos “una influencia negativa los unos en los otros”. Supongo que cuando hablan de esa influencia “negativa”, los fascistas se refieren a lo que los obreros y los luchadores revolucionarios llamamos solidaridad. Y yo creo que el principal motivo de que no me junten con los compañeros vascos, está precisamente en los lazos de solidaridad y amistad que hemos ido tejiendo entre nosotros a lo largo de estos años. Además, lo de las “órdenes de Madrid” no se sostiene de ninguna manera, ya que en noviembre trajeron a esta prisión a mi camarada Mª Jose Baños Andujar, presa política de los GRAPO, que sí está compartiendo módulo con las compañeras vascas.
Por otra parte, Mª Jose y yo, como miembros del mismo Colectivo, solicitamos que nos autorizaran a comunicar por locutorios, ya que en esta prisión están autorizados las comunicaciones intermodulares entre amigos (él único requisito que le exigen a los presos sociales es que hayan mantenido correspondencia durante 2 meses). No obstante, nos las han denegado argumentando que “no consta ningún tipo de relación personal” entre nosotros. Algo absolutamente falso, pues nuestros carceleros saben de sobra que ambos formamos parte del Colectivo de presas y presos políticos del SRI, PCE(r) y de los GRAPO, y que como integrantes del mismo, mantenemos correspondencia intercarcelaria desde ¡¡junio del 2005!!.
Pienso que es importante denunciar todas las arbitrariedades y las medidas represivas con las que tanto se prodigan en las cárceles esos que se hacen llamar “demócratas”.
Pero en este caso, es más importante aun destacar la solidaridad que nos están brindando las presas y presos políticos vascos. Recién llegado a esta prisión, los compañeros vascos me hicieron llegar el mensaje de que no estaba solo y que podía contar con ellos para lo que fuera. Y efectivamente, no me siento solo, porque los gudaris me están demostrando con hechos que contamos con su apoyo y solidaridad. Varios de ellos me contaban que hace años, en otras cárceles y en diferentes circunstancias, fueron ellos los que recibieron el apoyo del Colectivo de presos políticos de SRI, PCE(r) y de los GRAPO.
Y lo cierto es que, aún de militantes de diferentes Colectivos, todos tenemos muy claro que la solidaridad y la unidad son nuestras mejores armas, ya que éstas nos hacen más fuertes frente a nuestro enemigo común: el Estado fascista español. ¡Viva la unidad antifascista!
David Garaboa Bonillo, preso político del PCE(r)
Cárcel de Dueñas (Palencia)
Enero 2008
+++++++++++++++++++++
Nota de un lector:
Acabo de leer la carta de David Garaboa. No suelo hacer estas cosas de escribir y contestar, pero no sé muy bien porqué, me ha llegado dentro y he imaginado por un momento cómo debe ser lo que está viviendo. Simplemente quería mandaros un mensaje de solidaridad. Un fuerte abrazo para él y para todos. Y para vosotros también, que hacéis un gran trabajo de difusión, y muy necesario, ya que si no, olvidaríamos que existen ciertas personas. Ánimo, y salud.
Carlos M.